Ha sido un bombazo la noticia sobre la acusación por corrupcción a la SGAE. Y una noticia que ha hecho felices a muchísimos ciudadanos. Por un momentó, incluso me hizo dudar del hecho de que la justicia española solo sirve a los grandes intereses económicos, y de vez en cuando se dedica a repartir justicia. Pronto se pasó, y quedo claro que no, la justicia está acatando perfectamente su papel de protejer a los poderosos de sus continuos abusos hacia los ciudadanos, y que "estado de derecho" es un eufemismo de "dictadura".
Han dejado libres a esos mafiosos y ladrones. Mafiosos porque sus ingresos los sacan de coaccionar y aterrorizar al ciudadano (me imagino que si la situación fuera al revés, el estado los llamaría terroristas), ladrones porque se lucran de ese dinero. Ni siquiera se cortan a la hora de mandar sicarios para recaudar la mordida.
Incluso aunque se hubiera hecho justicia, estos desgraciados tendrían que estar entre rejas hace ya años. Incluso aunque sus acciones mafiosas fueran legales, haría años que tendrían que haber suprimido la SGAE ante el clamor popular (pero eso sólo hubiera ocurrido en una democracia, donde el pueblo sería quien gobierna).
Pero nada de eso ocurre. Como siempre, el poderoso hace lo que quiera sin consecuencias. A quien la SGAE señale con el dedo seguirá estando condenado, mientras ellos se ríen de nosotros a nuestra cara. Que el hartazgo y odio que generan los lleven a la ruina, economica y personal. ¿Presunción de inocencia? ninguno de los imputados vale ni el suelo que pisan. Toda la capacidad de almacenamiento que tiene Google no sería suficiente para enumerar todos los abusos de estos seres infrahumanos.
¡Menos tolerancia y manos levantadas, y más contundencia! Estos salvajes no entienden de diálogo, sólo entienden violencia.
